O what is this magic?
Seguramente llego tarde a la fiebre por las cejas. Sé que es
una parte importante del maquillaje para que quede todo pulido y perfecto, pero
tengo que reconocer que me producía un rechazo absoluto lo artificial y
recargado que se ve en muchos casos. Por esto no pasaba de, algunas veces,
domarlas un poco con un gel de cejas transparente, que aunque no me terminaba
de convencer porque quedaban brillantes y crujientes, por lo menos las
conseguía más visibles.
No sé porque nunca me había llegado a fijar en el gel de
cejas con color, pero cuando empezaron a sonar nombres como Essence con sus
buenísimas referencias me dije que mucho no podía perder por probarlo.

Me quedo con la idea del producto, sé que hay un millón en
el mercado hoy por hoy, y voy a seguir probándolos hasta dar con el color y la
textura más a mi gusto. Uso el tono claro del Make me brow de Essence, pero me
parece demasiado frio para unas cejas claras y las oscurece más de lo que me
gustaría. De todas maneras es un color muy versátil que incluso usaría en cejas
más oscuras ya que deja un aspecto muy natural, como una sombra de tu propia
ceja lo que da la sensación de tener más volumen. Digamos que es un tono medio
universal. El tono oscuro lo usaría solo en cejas muy morenas, pero nunca
tenemos exactamente el mismo color de pelo que en las cejas, así que estudiadlo
primero.
La textura es algo más densa que la de una máscara de
pestañas, que aunque viene bien para rellenar, no se distribuye de manera
uniforme por toda la ceja, pero de esto no me quiero quejar mucho porque es el
primero que pruebo y seguramente tenga que aprender a utilizarlo correctamente.
El cepillo, de todas maneras, me parece perfecto tanto en tamaño como en forma
y las cejas no se quedan apelmazadas como si no pudieras gesticular sin
partirte la ceja.
Como he dicho, seguiré probando más geles de cejas con
color, pero sin duda ha sido un descubrimiento para mí, es muy fácil de
utilizar, da una apariencia mucho más cuidada aunque lleves cuatro cosas en el
resto de la cara para dar buen aspecto. Cuando leía a gente que decía que no podía
salir sin hacerse las cejas antes me chirriaba, pero con lo rápido y bonito que
queda el resultado, ahora las entiendo y comparto. Lo confieso, me he vuelto
una cejadicta.